miércoles, 7 de septiembre de 2011

Diálogos...

-Suspiremos... después de todo es lo único que nos queda por hacer, podemos mirarnos, olernos e incluso hablarnos, pero de ningún modo podemos reírnos.
-¿Qué crees que sucede?
-Francamente no lo sé.
-¿Y qué propones?
-Me cansé de proponer.
-¿Y qué hacemos?
-(Silencio)
-Es fácil sugerir un problema, pero al parecer no es tan fácil sugerir la solución ¿verdad?
-Alguien me mencionó una vez, que los problemas no existen, solo situaciones complejas que siempre tienen una manera de mejorar.
-Ante eso, entonces ¿cómo remedias esto?
-Somos dos en esto, se remedia entre ambos, la responsabilidad recae de la suerte de ambas caras de la moneda.
-Pero esto no es azar.
-La realidad es entonces, que uno falla y el otro se ahoga, ¿cómo funciona el mundo?
-Bajo sistemas impuestos, pero todo sistema tiene fisuras que se deben parchar cuando se presenta una complejidad que amenace el sistema.
-Dado lo que dices, ¿tienes tú algún parche para esta fisura?
-Creo que deberíamos cerrar este dialogo.
-Probablemente, pero eso no soluciona nada, todo lo que comienza como esta conversación, en un determinado momento acaba.
-Antes de continuar debemos comprender que somos materia y la materia no se destruye, se transforma.
-Entonces nuestra solución es transformarnos, aunque siento que tu ya me adelantaste.Te seguiré los pasos, pero seguramente no avancemos en la misma dirección, quizás ya escogiste el sendero, y en ese caso solo me cabe desearte suerte y prosperidad.
-Gracias, es todo lo que quería oír, finalmente tu seguridad magnetiza mis pies a la tierra. Se que estarás bien.
-Lo estaré, siempre lo he estado. Así como tu, la indolencia se ha vuelto un asunto común de mi día a día.
-Fin de esta conversación.
-Cambio y fuera.

miércoles, 15 de junio de 2011

Inspiración...

Vengo hace días con la emoción brotando por mis poros, y es que tú con esa tierna sonrisa llenas mis mañanas de dulces amaneceres cálidos, por más que el clima quiera contradecir mis sentimientos, tu me haces sentir calidez hasta los huesos.
En este momento estoy escuchando música, y esta canción habla como por si sola de lo hermoso, confuso y difícil que se torna lo nuestro con el pasar de los años. Muchas personas se enamoran y olvidan, pero nosotros nos enamoramos y nuestros corazones nos exigen reunirse, es como si fueran imanes. Imanes por que sabemos que muchas veces somos distintos, partiendo por que eres Mujer y yo un Hombre, y aparte de ello... bueno no existen muchas diferencias, más que las que inventó mi estupidez, pues la realidad es que ambos nacimos complementando al otro.
Quiero detenerme y decirte algo, si a ti!, tú que en este momento lees atenta y expectante, Te Amo y nada ha cambiado, desde el día en que te bese por primera vez... desde ese momento que mi corazón es solo para ti y desde ahí que mis sueños son solo para ti, desde ese entonces eres la que le pone la luna a mi universo y hace mis noches más bellas... Voy a continuar contigo, por que estás en mis ojos día a día y continuaré contigo luego de estar contigo, por que eres tú lo que merece mi absoluta protección, mis brazos, mis besos...
creo que puedo decirte y escribirte mucho más por que quedan años por delante para ambos, creo que el tiempo nos enseñó una importante lección, ni él puede separarnos!

Déjame decirte algo - Chico Trujillo - Albúm: Arriba las nalgas

Dejame decirte algo,
ella es la de mis sueños, 
se encarga mi cara de decirlo, 
dejame decirte algo 
a veces no me crees 
se encarga tu cara de decirlo 

Ven, ven ven, bailemos... 
musica sonando en la otra pieza, 
que santiago esta bien, 
que la cosa anda mal, 
delincuencia y salud, 
vuelvo a verte hoy. 

Hay que reconocer, 
hay que aprender, 
hay que pensar, 
pedir perdon, 
tambien a veces...

Suelo pasarlo bien es como no tener presion, 
es como no tener pasion... de un sueño...

Y de mañana se levanta todo el dia acostumbrandome a las cosas que te diga 
como no tener mi calma solo para ti. 

Dejame decirte algo ella es la de mis sueños, 
se encarga mi cara de decirlo 
dejame decirte algo a veces no me crees 
se encarga tu cara de decirlo...

Ven, ven ven, bailemos... 
musica sonando en la otra pieza, 
que santiago esta bien, 
que la cosa anda mal, 
delincuencia y salud, 
vuelvo a verte hoy 

Dajame decirte algo...





Al menos mi interpretación de este tema es que te amo y punto =)


http://www.youtube.com/watch?v=ZZKH7uAtH6w

viernes, 10 de junio de 2011

Lagrimas de Arco Iris más grandes que nunca!

Camino de noche por la ciudad, y me parece tan bella a oscuras.
Sin la molesta luz artificial, ni falsos héroes grises que tapen con sus capas la belleza de las estrellas.
Pareciera que la luna está más grande que nunca, ilumina mis pasos y los llena de energía,
los acaricia suavemente tras un destello de melancolías, y sepulta con su nítida calidez,
las hojas secas de mis zapatos.
Cuento cinco pasos mirando al suelo, pues el suelo es el descanso del resplandor purificador del cielo,
y es que la verdad es simple, todos necesitamos cobijarnos un tiempo con la frialdad del piso, para de ese modo, nunca perder el encanto que nos provocan las cosas bellas. Al concluir mis cinco pasos, antes de volver a mirar la majestuosidad del imponte infinito, el horizonte me sorprende con un bello arco iris, uno tan grande y luminoso, que cautiva mis heridas transformándolas en simples rasguños, y así cuando tomo la determinación de pasar bajo sus colores, siento el alivio de sus lagrimas tocando mi cuerpo como la seda y suavizando mis latidos antes de paralizar mi marcha.
Estoy llegando al fin de mi camino y descubrí todo lo que tenía que saber, se que para morir en paz debo primero sanar mis yagas sangrantes del pasado y avanzar al ocaso de mis días, tranquilo y apaciguado por los umbrales de la profundidad.
Finalmente debo agradecerte hacerme retroceder a oler los campos de girasoles que plantamos juntos un día, pues hoy se ven como la luna "más grandes que nunca"...

Bien para este escrito quiero citar a un maestro con su obra maestra: Fito Paez y su tema Giros...

Giros By Fito Paez

Giros
existe cielo y un estado de coma
cambia el entorno de persona en persona

Giros
dar media vuelta y ver que pasa ahi afuera
no todo el mundo tiene primavera

Flaco donde estás?
Estoy imaginándome otro lugar,
estoy juntando información,
estoy queriendo ser otro (otro tipo).
Mi necesidad se va modificando con las demás;
asi mi luna llega a vos, asi yo llego a tu luna.

Giros
todo da vueltas como una gran pelota
todo da vueltas casi ni se nota

Giros
fotografía de distintos lugares
fotográficamente tan distantes

Suena un bandoneo
parece de otro tipo pero soy yo,
que sigo caminando igual,
silvando un tango oxidado.

Giros 


jueves, 19 de mayo de 2011

Sabores relevantes para los recuerdos... abstractos para el presente... insospechados para el futuro.

 Se suman a la larga lista de bellos momentos, esa que también tiene malos recuerdos. Así como los besos agridulces, si, precisamente así. Hechos que algún día fueron el alimento de grandes esperanzas, de sueños iluminados por la dicha de crecer como persona, de anhelos que provocan dentro de las almas -incluso aquellas devastadas por la crueldad- a construir en su faena de eternidad, un castillo de arena que no pueda ser derribado por el mar.
 No importa que el poder de los recuerdos, ni la grandeza de las metas, no tenga el mismo valor para todos, pues nuestra única certeza, es que el acto que llevas a cabo tiene una finalidad y esa finalidad debe cumplirse, de ser así el resultado puede no ser el esperado, y sea como sea... Siempre logramos obtener algo.

domingo, 15 de mayo de 2011

Una distancia considerable

Camino con las manos congeladas, mis dedos son atrapados por la penetrante briza helada que el frío les proporciona. He visto en mi vida muchas cosas, y aún así me detengo por un momento a cautivarme con algo que de lejos llamó mi atención con impaciencia. En las noches, en el cielo, las nubes hacen de la luna una luz fríamente aterradora, y su ves la visten de elegancia, lo que tenía enfrente de mis pupilas se asemejaba mucho a eso, a la terrorífica y elegante luna en las noches nubosas. Parce extravagante, pero por alguna, razón sin sentido aparente, aquello que para muchos es una osadía innecesaria, aquello que podría considerarse un acto de masoquismo, para mi era seductoramente necesario, tanto así que sin importar el temor que me diera,  me acerqué deslumbrado por su falta de brillo, anonadado por su opacidad, incliné mi cuerpo hasta ella, la tomé entre mis manos y le pregunté - se que si me hablaras dirías que estoy loco, como mucha gente debe de pensar sobre mi, sin embargo ¿quieres acompañarme en este viaje? - no obtuve respuesta, de manera que decidí, que me haría dueño, amo y señor de su destino, y en esa tajante decisión, a pesar de ser tan autoritaria, no me hizo sentir dictador de su vida, por el contrario, me consideré el salvador de su vida. 
Mi camino no sería largo, ni arriesgado, ni sería un viaje emocionante e interesante. Conservando el temple que me caracteriza, caminé por unos metros con mi nueva amiga en las manos, feliz, contento, aunque no calmara en lo absoluto el frío de mis manos, por que de hecho, ella estaba más fría que yo. intenté taparla con las ropas blancas que cubrían mi cuerpo para comprender si obtendría calor, pero fue frustrante comprender que no habría jamás calor en su fisionomía. Bajo la presión de entender que no podía cambiar su estado inercia, tomé la consideración de acabar con esta situación, sin premeditar los riesgos de la operación. La apreté en mi mano derecha, la sostuve unos segundos antes de culminar mi furibunda acción, aspiré el aire escasamente natural que existe en la ciudad, tomé fuerzas, y la lancé con todas mis fuerzas a algún destino desconocido para mis ojos... 
Pasó un momento antes de escuchar un grito desgarrador, y solo pude mantener mi perplejidad, y aquello fue mi única reacción, y luego de unos instantes aparecieron esos tipos de los que huyo constantemente, no logré escapar pues por el grito paralizó cada uno de mis músculos. Los tipos en su disposición poco amable, golpearon mi estomago dejándome así privado de oxigeno, lo cual finalmente me derribó, dándome como lecho, el frío y húmedo suelo. Al momento en que percataron mi falta de reacción, me tomaron entre sus brazos y me llevaron de regreso a mi aconchada habitación, y de mi congelada amiga no volví a saber jamás, solo pude suponer que su dura y rugosa forma debieron herir a alguien, y bajo esa circunstancia no me arrepiento de que la distancia tan considerable que cruzó gracias a mi,  tuviera un objetivo aleatorio, que le diera de alguna manera aunque sea, unos instantes de vida.


Ojalá comprendan este texto, creo que es importante aprender a ponerse en el pellejo de gente que quizás nunca crean que serán.

domingo, 8 de mayo de 2011

Tormenta de cuerdas

Entre tantos restos de creaciones añejadas con los años, he encontrado verdaderas obras sentimentales, que muy probablemente no valgan un solo peso para absolutamente nadie. Sin embargo, para mi, son un tesoro de memorias relativamente obsesivas, recuerdos de extrañar que algún día vuelvan a suceder. Aquellas composiciones me hicieron recordar que lo que más deseaba era nunca perder ese sentido que hacía a mi corazón sentir, pero retornar a ese tiempo, sería decrecer todo lo que he madurado hasta ahora, pues ahora tomo el peso de mis errores y el por que hoy en día significan para mi una pesada cruz que sostengo desde hace varios años. Por lo tanto, si he de cargar lo que cargo, es por que he de merecer lo que merezco.
Todo esto, ha traído a mi un mar de inspiraciones nuevas, inspiraciones que me dicen: "es hora de despertar al brutal golem de letras dormido en tus entrañas". Entonces es momento de tomar la guitarra, y poner mis dedos, mi mente y mi voz a trabajar. así como al escribir estos textos, -escuchando a yanni, el pianista y compositor- cuando recuerdo momentos tan finos y agresivos como los de mi pasado, mi mente se llena de alusiones referentes a composiciones llenas de sentimientos y extractos de vidas pasadas donde me sentía feliz, pero quería aún más, quería llenarme de esa sensación, como si hubiese sido un vicio alimentado por mi codicia, por mi ambición...

"Déjame decirte bella mía, que no importa lo abandonado que esté mi corazón en el presente, por que en el pasado sembraste en él, frutos de armonía, y aunque a su lado yo planté aquellas matas de agonía y en mi presente han crecido ellas primero, se que cuando mueran, será por que en el futuro comprenderé que las semillas que insertaste en mi pecho, son más fuertes que las que intentaste cortar en su momento. Si he de ser feliz en el silencio, reconoceré que fueron tus frutas las que endulzan ese futuro que algún día se convertirá en mi presente".




Gracias, Dedicado.- (No pondré el nombre, por que no quisiera que aquella persona se sintiera incomoda)

sábado, 23 de abril de 2011

Rincón de Inmitri - Primera parte - Capitulo primero: Nuestra primera vez

  Como nunca se sentían emocionados, como si el evento para dar paso a su hombría fuera el de llegar al “rincón” y dejar de ser un “bodrio” de aquellos que mal agradecidamente recibían los pobres fuera a la iglesia del poblado. Para el y sus amigos esta experiencia era como la que sus padres contaban cuando las madres y hermanas salían para intercambiar, bordados y recetas de repostería, entre otras cosas. ¿Como podrían de algún modo olvidar lo que sería prácticamente la única educación que sus padres podían heredarles?, esas sorprendentes historias de tabernas acompañadas de una vieja y oxidada banda de mandolinas, violines y extraños tambores, que daban el ritmo a tan lúdicas y épicas historias nunca antes relatadas. Sus padres siempre les comentaban que aquellos ancianos, no solo eran hombres con experiencia, si no que a pesar de los años sus mentes eran tan frescas como las de un jovencito recién descubriendo el mundo, hombres que alguna vez habían servido al ejercito por proteger su malograda patria, a la que tanto adoraban.
Sin embargo, de un tiempo hasta ahora, las cosas habían cambiado, ya no eran los mismos ancianos, ni los mismos músicos y quizás tampoco las mismas historias, pero había algo que en sus corazones, algo sentían que no había cambiado, el espíritu de aquel lugar que generación tras generación obedeció a las mismas intenciones, noches de hombres, noches de embriagarse, noches de historias de guerra, amores, y de seguro leyendas tan inverosímiles como sus excusas para llegar ebrios a casa. Si, nada mejor que eso, la mejor diversión para un hombre, una taberna, amigos, cerveza de raíz y las más estúpidamente increíbles historias que nunca escucharían en algún otro recinto.
Los cinco amigos caminaban felices, jugueteando entre ellos como de costumbre. Su crianza juntos los hizo tan acérrimos, que comprendían que este gran paso debían darlo juntos, después de todo era la primera vez para cada uno de ellos, y era razón suficiente para celebrar, pero no era lo que más les intrigaba de ese lugar, necesitaban estar en primera fila para oír lo que la mayoría de los hombres querían escuchar en ese lugar, y compartir también, todas esas vivencias que los llenarían de gloria entre los suyos, y que a su vez alimentaría la imaginación de otros, y por no decirlo, las propias también.
La bruma se hacía más espesa acorde pasaban los segundos, pero lograron divisar gracias al brillo de un faro en una esquina, esa tabla carcomida por el tiempo, esa que seguramente si fuese un hombre, tendría más arrugas que las hojas en otoño, y más vivencias que los mismos ancianos que se posan en la misma taberna todas las noches desde que tienen memorias. Al corroborar todos juntos el nombre del lugar, no hubo necesidad de decir algo, ni de mirarse, ni de hacer ningún tipo de manifestación, pues solo necesitaban caminar hasta el que siempre fue su sueño y su destino, la anhelada taberna que recibía el nombre de “Rincón”.
Una vez dentro ya todo era diferente, el ambiente era calido, pues nadie se volteo a mirar a los nuevos clientes, ni siquiera el tabernero, o los mismos músicos, tampoco se vieron desconcentrados por su llegada, todo parecía ser normal, sin embargo, para ellos era el lugar perfecto, ese que en sueños veían distante, podían escuchar las carcajadas de algunos hombres en algunas mesas, y en otras los estruendos de los bronces cilíndricos chocando entre ellos llenos de cerveza de raíz. No podían creerlo era todo absolutamente real, como siempre lo imaginaron, o como siempre nombraron el suceso, “el salto a la más profunda felicidad”. Parecía que todo fuera jocoso, y a medida que pasaba el tiempo el ambiente se hacia más hogareño para ellos.
Llegaron a una mesa y ahí se posicionaron un momento, hasta que se hiciera el dinero para comprar las jarras de bronce con el tan preciado néctar, ese que consideraban el más dulce de los zumos, ese creían traería absoluta felicidad a sus jóvenes vidas. Al hacerse con el dinero uno de ellos exclamó.

-         ¡Oh! Creo que si tenemos suficiente, después de todo Asgard ya es teniente en el ejercito, si falta el colabora con el resto – dijo presuntuosamente, mientras que el resto de los amigos estalló en carcajadas, aunque claro que a Asgard no le pareció tan gracioso, a lo que respondió.
-         Vale, vale chicos está vez pondré si falta pero a la próxima debéis traer vuestro saco con monedas, que no me viene en gracia alguna fomentarles el vicio – dijo alegremente el muchacho. Asgard era un joven sumamente agradable para las personas, no era un tipo temperamental, ni tenía ambiciones grandes en la vida, sin embargo, siempre fue muy ingenioso y en momentos de crisis siempre era el factor que marcaba la diferencia entre el fracaso y el éxito. Ha de ser por eso que tan prematuramente ascendió en la milicia, de entrar como un simple soldado de quinta categoría, hoy es un Oficial de la guardia regional de su nación, lo cual llena de orgullo a su familia, que siempre ha sido de la clase campesina.

Al tener el dinero reunido Joud lo tomó y emprendió camino hasta el tabernero, necesitaba cinco jarras de cerveza de raíz para el y sus cuatro amigos en la mesa. Joud era un hombre vigoroso, había obtenido de su padre no solo la profesión de forjador y artesano, también el cuerpo robusto y musculoso que lo caracterizaba. Desde muy niños el y Asgard siempre fueron los mejores amigos,  jugaban juntos y vivieron verdaderas aventuras, también eran compañeros de travesura, por lo tanto, tenían los mismos castigos, de hecho gracias a sus travesuras sus familias también se hicieron grandes amigos. Ellos cultivaban en sus recuerdos, las enseñanzas que les dio la vida de pequeños, y que hasta hoy en día estimulan en sus vidas el pasado para crear del presente una nueva aventura, y de esa forma dar paso al futuro con la incertidumbre que merece. Es por ello que hoy en día siguen frecuentando entre ellos sus hogares, y sus andanzas, las cuales hoy los habían traído hasta aquí, donde siempre soñaron llegar, es por ello que para Joud, era tan imprescindible el momento de anunciar el pedido.

-         ¡Hola!, buen hombre os agradecería 5 jarras de cerveza de raíz - dijo imponente el joven Joud.
-         Por supuesto joven, enseguida sale su orden – el tabernero extrañado y con una cierta curiosidad preguntó al chico - ¿a caso no eres tú el hijo del viejo Vaud, el forjador de Inmitri?
-         ¡Claro! El mismo – contestó orgulloso el muchacho.
-         Pues tu padre frecuentaba mucho esta pobre taberna, supongo que vienes a continuar con la costumbre familiar de los hombres de tu linaje, este lugar, tiene la generación de tu familia marcada en nuestros muros, todos han vivido noches de juerga dentro de esta pozada.
-         Pues he venido para continuar la tradición, mis amigos y yo estamos en la mesa de enfrente a la ventana.
-         Está bien joven Joud, ya está listo, tenga las jarras – Joud las recibe amarrándolas entre sus poderoso brazos y se dirige a la mesa, pero antes – por favor joven, envíe saludos a su parte en mi nombre, el hoy en día viejo Fhip.
-         En su nombre amigo.

Y así caminó con un paso seguro hasta la mesa, para no derramar ni una sola gota del preciado brebaje, y ya estando en la mesa, colocó las jarras sobre la misma y dijo.

-         Al fin llego el momento de disfrutar nuestra primera noche como verdaderos hombres.
-         Así es querido amigo – contestó Asgard – aunque tardaste una eternidad, ¿es que acaso hiciste tu mismo la cerveza? Kohl y Poul ya casi morían de angustia – a lo que los muchachos sueltan risa nerviosa. Kohl y Poul eran gemelos, ambos trabajaban en el rubro de las artes medicas, Kohl  trabajaba como un curandero, mientras que Poul como un boticario, quien además de vender brebajes para la curación de males, también los preparaba, ambos fueron hijos de un monje autoexiliado de su fe, por lo cual al dejar de lado su creencia, pasó a ser un simple campesino más. De ese modo es como Kohl y Poul conocieron a Asgard y Joud, y es que sus padres tenían lo mismo en común. Por algún motivo terminaron trabajando como campesinos, así como el padre de Joud en algún momento fue un gran forjador y artesano, por problemas de salud de su padre tuvieron que marcharse a hacer las labores campesinas a las afueras del pueblo, para cubrir al enfermo abuelo de Joud. Por otro lado, el único que siempre supo de campo, fue el padre de Asgard quien siempre vivió ahí, generación tras generación.

Los muchachos estaban listos para alzar las jarras y brindar por el momento, pero alguien no estaba listo aún. Tippin, el más joven de los cinco, el era aprendiz de un escritor que en algún momento se dedico como bardo a cantar por los pueblos sus poesías sobre guerras y enfrentamientos de hombres con extrañas y peligrosas criaturas. Sus padres en algún momento pertenecieron a la nobleza, pero por esos azares del destino las oscuras manos de la perversidad humana, el amor al poder y los factores de adquisición económica, terminaron por dejarlos sin ningún Kerin (moneda nacional Frousthak),  sin embargo, se adaptaron rápidamente a su nueva vida, y encajaron con sus vecinos, y gracias a lo eruditos que eran, por haber sido nobles, compartieron su cultura y sus saberes con sus nuevos amigos y vecinos, los que desde luego eran amigos de su hijo Tippin, quien estaba terminando es escribir un verso que se le ocurrió de la nada, lo que le impedía llevar a cabo el poder probar el brebaje con sus fraternos compañeros.

-         vamos Tippin, no podemos esperaos toda la noche para beber.
-         Lo siento amigos, pero debo escribir este verso antes de que se escape de mi corazón – dijo al tiempo que soltó la pluma y guardo sus cosas en el bolso que siempre trae con el, tomó su jarra y miró a sus amigos – bien amigos míos estoy listo, demos paso a este nuevo camino – afirmó con una enorme sonrisa en la cara, la cual lo consagró entre sus amigos con Sonrisita.

Y así los jóvenes amigos, tomaron sus jarras, todos muy enérgicos a pesar de que era la primera vez que sostenían una en sus manos y se notaba el pesar en el larguirucho brazo de Tippin, que por supuesto era el menos atlético de todos. Llegado el momento, Asgard toma la palabra.

-         Amigos, que este dulce zumo de campeones, de guerreros, de hombres salvadores de la vida, de intelectuales que luchan por los sueños, de gente que trabaja por sus familias, nos lleve a donde siempre deseamos llegar, ¡alcen sus jarras amigos que esta noche debemos beber hasta el fondo de este bronce!

Y así empinaron sus jarras pasta lo alto de sus cabezas, y el brebaje bajó rápidamente por sus gargantas, pero antes de que pudieran llegar a la mitad, un suceso nunca antes visto, ni por los clientes de la taberna más ancianos, ni por el mismo tabernero, quien llevaba años trabajando en ese lugar había visto, un prominente impulso del brebaje eyectado desde la boca de los jóvenes, tomando como destino el rostro de ellos mismos, quienes se encontraban de frente en ese momento. Las caras de sorprendidos y las espontáneas, pero tenues risas que comenzaron a aparecer, no eran nada en comparación de las caras que tenían los amigos a verificar la amargura del brebaje que pidieron. Esto no era el dulce brebaje del que hablaron sus padres, no era ese néctar por el que debían dar el día trabajando, todo fue una farsa, ¿o es que había algo que ellos no habían comprendido? Lo único real en ese instante fue que sus rostros goteaban  como sus camisas, y que luego de sacar las arrugas de sus ojos en esas deformes caras, soltaron la carcajada que inundó la taberna. A pesar de que nada era como pensaron, a pesar de que pudieron sentirse engañados, comprendieron finalmente que nada en la vida era más gratificante para ellos que reír y disfrutar con sus amigos, incluso de los errores que parecieran ser tan absurdos como la misma reacción de escupir lo que pensaron era literalmente “dulce”. Desde ese entonces asimilaron una realidad diferente, aquello no es dulce solo por su sabor, lo es por lo que provoca en quien lo bebe, quizás no sea el trago lo que lo haga dulce a si mismo, quizás son las personas con quienes lo compartieran. Sea como sea se sentían felices y orgullosos de haber vivido la primera vez en una taberna.

viernes, 22 de abril de 2011

Apertura

Debo de agradecer a que alguna vez me dieran esta idea... pero creo que no debo apresurarme a nada y comenzar a trabajar...